PUBLICIDAD ASTURIANA PARA EL RECUERDO:
Hace más de un año empezamos a recopilar anuncios, carteles y antiguas etiquetas de marcas asturianas con el fin de dar a conocer la importancia de la industria de Asturias a lo largo del tiempo. Lo llamamos
"Publicidad asturiana para el recuerdo" y lo compartimos en nuestra página de
Facebook. Es un álbum vivo porque cada poco vamos añadiendo más y más imágenes, que completamos con una breve reseña y con los comentarios y recuerdos de nuestros seguidores.
Hoy, en el blog, hemos querido seleccionar algunas de las imágenes de una de las series publicitarias más artísticas: la de las sidras achampanadas, sidras espumosas o sidras champagne.
Esta bebida empezó a fabricarse en Asturias para ser exportada al comercio de ultramar en el siglo XIX, época a la que pertenecen la mayoría de estos carteles y etiquetas.
Una de las marcas de sidra achampanada más conocidas, aún en activo, es la de EL GAITERO, de Valle, Ballina y Fernández. Esta fábrica de Villaviciosa se fundó en 1882 y su eslogan es muy conocido: "Sidra El Gaitero, famosa en el mundo entero".
(Fotografía extraída del libro: "Valle, Ballina y Fernández: historia de una empresa", de Francisco Crabiffosse Cuesta).
Para saber más sobre la historia de esta marca, podéis visitar su web:
La publicidad asturiana antigua es preciosa y, como ejemplo, esta foto del mural publicitario en azulejos de la sidra champagne VERETERRA Y CANGAS, de Gijón, empresa fundada por Luis Vereterra y Cangas a finales del siglo XIX.
En 2001, Gijón le dedicó una calle al fundador de esta fábrica, que fue proveedora de la Casa Real.
Para más información sobre su historia, visitad la página:
Este tipo de anuncios que vemos en la publicidad de Vereterra y Cangas, con uno o varios asturianos vestidos de traje regional, es común en gran parte de la publicidad de los fabricantes de esta bebida. Probablemente se deba a la intención de querer identificar este tipo de sidra con nuestra región. Así lo vemos, por ejemplo, en este anuncio de Zarracina de 1910:
Lo mismo en éste otro, también de 1910, que corresponde a EL HORREO, la gran sidra champagne de Colunga. Como curiosidad, esta marca patrocinó al Gaitero de Libardón en sus inicios internacionales. Con su patrocinio fue a La Expo de París en el año 1900.
Otras ejemplos los podemos encontrar en el caso de las marcas: La Asturiana, fabricada en Caravia, La Aldeana, fabricada en Gijón, El Cielo de Asturias, o El Asturiano, ambos también de Gijón.
Algunas marcas llevaban como nombre un gentilicio vinculado al pueblo del fabricante o al de la familia del mismo. Tal es el caso de La Polesa, La Camuñesa, La Praviana, La Carbayona...
La más curiosa y simpática es La Carbayona, por fabricarse en Gijón con el apelativo de los habitantes de Oviedo... ¡una carbayona de Gijón no deja de ser algo sorprendente!
No obstante, si es por vincular el nombre de la marca a Asturias, nada mejor que
El Guirrio, sidra champagne hecha en La Felguera, con el nombre del
personaje más típico del Antroxu en los concejos de San Martín del Rey Aurelio y Langreo.
Cómo no, la monarquía, y en particular la monarquía astur, tampoco falta en esto de los nombres publicitarios de sidras champagne asturianas. Así lo vemos en marcas como Pelayo, Don Damián, Princesa de Asturias...
La sidra champagne Princesa de Asturias, de Colloto, era propiedad de los mismos dueños que la desaparecida cerveza de El Águila Negra y tenía carteles publicitarios como éste:
Por su parte, la Champanera de Villaviciosa, proveedora de la Casa Real durante años, con su marca Reina Victoria, editó varios carteles para publicitarse. Estos son algunos ejemplos:
En Colloto, otra gran empresa en este sector era Industrias Cima:
En Avilés, llegó a ser muy reconocida la sidra champagne marca El Oso, fabricada por Muñiz, Gamba y Belaunde:
En Gijón es donde hemos localizado, hasta la fecha, más marcas de Sidra Champagne. A continuación os mostramos algunas etiquetas de los que hemos seleccionado.
Gracias a todos los que colaboráis en la colección de estos anuncios antiguos y a los que los ilustráis con vuestros recuerdos y vivencias.
¡Ojalá que la historia de la importante industria asturiana no caiga nunca en el olvido!